Lo bueno de estar tan enganchado a la música y no quedarse estancado en un estilo es la cantidad de estilos, sonidos y propuestas que puedes llegar a conocer. Todo puede llegar a enriquecerte de alguna manera y además, con el tiempo, puedes estar seguro que siempre tendrás la canción perfecta para cada momento. Soy de los que piensa que la música puede darte calma, ánimos, ayuda, relajación, felicidad y un sinfín de sensaciones más, siempre y cuando le dediques la atención necesaria para entenderla.
La canción que comparto hoy es una de esas que puede levantarte el ánimo e inspirarte en tus objetivos. Es musicalmente muy sencilla, pero contundente y llena de rabia, signos de identidad del grupo que la creó. Ktulu la incluyó en su tercer álbum, Confrontación, editado en 1997. Este disco es, posiblemente, uno de los más importantes en la escena metal española y supuso una auténtica revolución en el sonido conseguido en ese momento.
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